El joven
estadounidense John Allen Chau quería introducir el cristianismo a la tribu que
nunca había tenido contacto con el mundo exterior. Al tratar de acercarse a
ellos, fue asesinado a flechazos.
QuePasaCOLIMA.-
John Allen Chau, el joven misionero que fue
asesinado a flechazos por un grupo de aborígenes en una remota isla en el
Océano Índico, ofreció peces y otros pequeños regalos para acercarse a ellos e
intentar evangelizarlos, según escribió él mismo en diarios y correos
electrónicos que se hicieron públicos este jueves.
El
joven "misionero" estadounidense John Allen Chau quería introducir el
cristianismo a la tribu que nunca había tenido contacto con el mundo exterior.
Por este motivo, el viajero se acercó a ellos.
En
el diario de Chau de sus últimos días, compartido con The Washington Post por
su madre, muestra un peligroso viaje a oscuras en un pequeño bote de pesca
hacia el área donde la pequeña tribu vivía en chozas. Los hombres, de
aproximadamente 5 pies y 5 pulgadas de alto con una pasta amarilla en la cara,
escribió Chau, reaccionaron enojados mientras intentaba hablar su idioma y
cantarles "canciones religiosas", escribió.
"Dios,
no quiero morir", fueron las últimas palabras que John Allen Chau escribió
en su diario.
John
escribió también en su diario que mientras se acercaba a ellos uno de los
jóvenes le disparó con una flecha, que perforó su Biblia.
"Ustedes podrían pensar que estoy
loco por todo esto, pero creo que vale la pena declarar a Jesús a estas
personas", escribió en una última nota a su familia el 16 de noviembre,
poco antes de dejar la seguridad del bote de pesca para conocer a los miembros
de la tribu en la isla.
Este jueves las autoridades indias
trabajaban para recuperar el cuerpo. El portavoz de la Policía de Andamán,
Jatin Narwal, indicó que "todavía" no han podido recobrar el cadáver
de Chau de la isla Centinela Norte, a la que está prohibido el paso para la
protección de las tribus que la habitan, si bien "continúan sus esfuerzos
para ello".
Mientras tanto, la Policía ha arrestado
a un amigo local de la víctima, un experto en deportes acuáticos y cinco
pescadores por ayudarle a llegar a la ínsula a sabiendas de que los aborígenes
que viven en ella son muy hostiles y no tienen contacto con el exterior.
"A pesar de conocer muy bien la
ilegalidad de la acción y la actitud hostil de los tribales centinelas hacia
los forasteros, esta gente colaboró con John Chau para su visita a la isla
Centinela Norte sin permiso de las autoridades", informó anoche en un
comunicado el director general de la Policía del archipiélago, Dependra Pathak.
Los siete fueron arrestados por violar
la regulación para la Protección de las Tribus Aborígenes y por "causar la
muerte de John Allen Chau", según la nota.
La víctima, que había visitado Andamán
anteriormente en varias ocasiones y llegó al archipiélago el pasado 16 de
octubre, viajó hace una semana acompañado de los pescadores para
"evadir" las patrullas en la zona, hazaña para la que les pagó unos
350 dólares.
El pasado jueves, Chau se desplazó hasta
la orilla en un kayak.
"En la mañana del 17 de noviembre
los pescadores vieron una persona muerta siendo enterrada en la orilla que por
la silueta del cuerpo, vestimenta y circunstancias parecía ser el cadáver de
John Allen Chau", explicó el alto mando policial.
Los hombres regresaron a Port Blair,
capital de Andamán, y avisaron al amigo local de Chau, que a su vez avisó a su
gente en Estados Unidos.
Las autoridades indias se enteraron de
lo ocurrido a través del consulado estadounidense en Chennai (sur).
El martes se realizó un reconocimiento
aéreo de la isla y el miércoles una delegación de altos mandos viajó a la zona
en barco para tratar de identificar el lugar del suceso, al tiempo que se ha
formado un comité para revisar los mecanismos para evitar visitas de
extranjeros a áreas restringidas, de acuerdo con la nota.
En un comunicado en la cuenta de la red
social Instagram de la víctima, su familia "perdonó" a los
responsables del fallecimiento y pidió la liberación de los arrestados en
Andamán, ya que Chau viajó "por voluntad propia".
La nota le describe como un
"misionero cristiano" que no tenía más que "amor" por los
centinelas.
La población aborigen en las islas
Andamán asciende a 28,077 individuos, según datos de la Comisión Nacional para
las Tribus (NCST).
0 comentarios:
Publicar un comentario